Las Experiencias de Willy Fogg (I)

Es curioso que a mí que no me gusta viajar me toquen todos los premios.... mi última experiencia un castillo con fantasma y todo en medio de un país con economía en transición. El lugar mu... bonito... pero mu... poco práctico. Para empezar fui en tren, toda la noche en un tren... en el que se suponía que tenia que dormir... pero ¡no!, a las cuatro de la mañana unos "amables" agentes de aduanas con uniformes y caras del antiguo régimen me levantaron del "catre" para pedirme el pasaporte. Como es habitual en mi... sobresalto... ¡donde coño he metido el puto pasaporte! (¿lo habré traído?... o se me habrá olvidado como siempre...). Pues aunque podáis pensar lo contrario... no, no acabe extraditada... encontré el pasaporte... desafortunadamente.
Así que llegué a la ciudad más próxima... a las 6 de la mañana donde se suponía que me esperaba un chofer que no estaba… ¿me habré equivocado de estación?... pensé (no sería la primera vez…). Pues no, para mi desgracia, el chofer se había perdido… Así que por fin acabe, dos horas y media más tarde y de tortuosas carreteras, en el castillo del conde D… (en este caso el sitio preferido de un alto cargo… de una economía en transición). Y allí me esperaban dos días de reunión…. que no fueron tan aburridos como cabía esperar….. Incluidas la plantación de un árbol (al que pusieron mi nombre… pobrecito que carga para toda la vida) y unas vistas inolvidables de un simpático y extraño alto cargo en un hoyo (cuyo nombre técnico es calicata….).
…. Más en próximos episodios… que no dudéis los habrá…

Mak